¿Qué son las vacunas?

Las vacunas son como un escudo mágico que protege nuestro cuerpo contra enfermedades. Cuando nos vacunamos, le estamos enseñando a nuestro sistema inmunológico (el equipo de defensa de nuestro cuerpo) cómo combatir virus y bacterias peligrosas. ¡Es como darle una clase de defensa personal a nuestro cuerpo!

¿Cómo funcionan?

Cuando una vacuna entra a nuestro cuerpo, lleva una pequeña parte del virus o bacteria, pero no te preocupes, esa parte no te hará enfermar. En lugar de eso, nuestro cuerpo reconoce a ese intruso y empieza a crear soldados, llamados anticuerpos, que son expertos en destruir al virus si alguna vez intenta atacar de verdad. Entonces, si alguna vez te expones a esa enfermedad en el futuro, tu cuerpo ya sabe cómo defenderse.

¿Por qué son importantes?

Las vacunas han salvado millones de vidas en todo el mundo. Por ejemplo, hace muchos años, la viruela era una enfermedad muy peligrosa que afectaba a muchísimas personas, pero gracias a las vacunas, la viruela fue eliminada por completo en 1980, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Otro ejemplo es el sarampión. Antes de que existieran las vacunas, el sarampión afectaba a muchas personas cada año. Ahora, gracias a las vacunas, esta enfermedad es mucho menos común, aunque sigue siendo importante vacunarse para evitar que vuelva.

¿Es seguro vacunarse?

Sí, vacunarse es seguro. Los científicos y médicos realizan muchos estudios antes de que una vacuna esté disponible para todos. Estos estudios, llamados ensayos clínicos, aseguran que las vacunas funcionen bien y no causen problemas graves. Por ejemplo, cuando apareció la vacuna contra el COVID-19, fue probada en miles de personas antes de que comenzaran a usarla para proteger a todos. Y aunque algunas personas pueden tener efectos secundarios leves, como fiebre o dolor en el brazo, estos efectos desaparecen rápidamente.

¿Cuáles vacunas son importantes?

Algunas vacunas importantes son las del sarampión, la rubéola, la gripe, y el COVID-19. Estas enfermedades pueden ser peligrosas si no estamos protegidos. Los médicos recomiendan que los niños reciban sus vacunas en ciertos momentos para estar siempre seguros.

Cuidando a todos

Vacunarse no solo te protege a ti, también protege a las personas a tu alrededor, como los bebés o los ancianos, que pueden ser más vulnerables a las enfermedades. Cuando muchas personas están vacunadas, es más difícil que una enfermedad se propague. ¡Vacunarse es un acto de valentía y cuidado por los demás!